Por qué ir a Budapest
Si buscas ideas para una estancia larga o corta en Budapest, reserva vuelos baratos con easyJet. El río Danubio divide en dos a la hermosa ciudad de Budapest. Dos tercios de la ciudad, Pest, descansan sobre el llano margen oriental, mientras que el otro tercio, Buda, se levanta sobre un terreno montañoso en la orilla occidental. La ciudad tiene casi 2.000.000 de habitantes.
La característica más impresionante de Buda es la zona llamada Colina del Castillo. En ella se encuentran los monumentos y museos medievales más importantes. La zona amurallada del castillo consta de dos partes: la Ciudad Vieja y el Palacio Real. La zona se conoce como Colina del Castillo porque fue aquí donde se construyó el primer castillo en el siglo XIII. Desde el centro de la ciudad se puede realizar un viaje pintoresco en funicular hasta el Palacio Real, desde el que se contemplan unas vistas magníficas de la ciudad.
La Ciudad Vieja es una zona medieval pintoresca con casitas de colores vistosos, calles estrechas y callejones. Aquí se pueden encontrar los llamados sedilias, exclusivamente típicos de Buda. Los sedilias son entradas medievales decorados que se encuentran en las paredes exteriores de las casas en las que los visitantes pueden descansar y protegerse de la lluvia o el sol. La Plaza de la Santísima Trinidad es el verdadero centro del distrito de la Colina del Castillo, con numerosos restaurantes y bares en las calles adyacentes. Bajo la Colina del Castillo se encuentra el Laberinto del Castillo de Buda, una red de grutas de 1200 m de longitud que se encuentra oculta a 16 metros bajo suelo. Es posible realizar visitas guiadas en las que se puede descubrir cómo se usaron estas cuevas a lo largo de los siglos (y además, si no está especialmente interesado en los hechos históricos, proporcionan un buen refugio del sol y la multitud en la calle).
El Palacio Real fue destruido y reconstruido en numerosas ocasiones a lo largo de la historia; la última vez durante la Segunda Guerra Mundial. Nunca ha sido reconstruido para uso residencial y, en la actualidad, acoge tres museos en el interior de sus muros: el Museo de Historia de Budapest, la Galería Nacional Húngara y el Museo de Arte Contemporáneo.
La Iglesia de Matías es casi tan antigua como el Palacio Real, y recibió su nombre en honor al rey Matías que contrajo matrimonio aquí dos veces. A principios del 1900, las labores de restauración pusieron al descubierto frescos medievales que habían sido cubiertos con cal por los turcos cuando transformaron la iglesia en una mezquita en el siglo XVI. En determinadas tardes se celebran conciertos de órgano, continuando la tradición de 1867 cuando se interpretó por primera vez la "Misa de Coronación" de Liszt durante la coronación de Franz Joseph.
La Ciudad Interior es el corazón de la otra parte de Budapest: Pest. La parte norte es la zona de moda, que cuenta con numerosas boutiques, restaurantes caros y hoteles de lujo. La parte sur ha experimentado un cierto resurgir en los últimos tiempos y ha pasado de ser una zona tranquila a convertirse en un barrio turístico, muy popular entre los estudiantes. Hoy en día está abarrotada de bares, cafés, discotecas y restaurantes.
El Parque Municipal proporciona a Pest espacios verdes abiertos, así como diferentes museos, tales como el Museo de la Aviación, el Museo del Transporte y el Zoo. Aquí también se encuentran los baños termales y las piscinas Széchenyi. La gente viene a Pest desde hace siglos a “tomar las aguas”, y algunos de los baños datan de la época de los turcos, mientras que otros son restos del periodo de Art Nouveau durante el que los baños termales curativos eran muy populares.