Por qué ir a Madeira
Si buscas ideas para una estancia larga o corta en Madeira, reserva vuelos baratos con easyJet. Los romanos fueron los primeros en llegar a las islas de Madeira que llamaron las Islas Moradas. Después permanecieron durante siglos sin ser descubiertas hasta que los marineros portugueses tropezaron con ellas y volvieron a ser pobladas por Portugal en 1420.
Madeira es ahora un destino popular durante todo el año, famoso en todo el mundo por su vino, su fantástico clima y un bonito paisaje. La isla principal del archipiélago, Madeira, tiene un clima semitropical y en ella se encuentra el bosque de hoja perenne más grande del mundo, el cual ha obtenido la categoría de lugar de patrimonio de la humanidad: el Bosque Laurisilva en el Parque Natural de Madeira. La isla es perfecta para las personas que busquen unas vacaciones activas. El origen volcánico de la isla ha creado altas montañas de 1.800 m y estas condiciones son ideales para practicar montañismo, rapel, senderismo, descenso de ríos, ciclismo de montaña y excursionismo. La pesca y el submarinismo son actividades muy populares en las cálidas aguas de Madeira, la Reserva Natural Garajau es famosa en todo el mundo.
La isla está dotada de bellas playas y ofrece un amplio abanico de oportunidades para unas vacaciones soleadas con los niños, o una escapada romántica para dos.
Funchal es la capital (y también la ciudad más grande) y el puerto más importante de las Islas Madeira, con un aire colonial. El centro de la ciudad es un laberinto de callejuelas empedradas donde miles de pequeñas tiendas ofrecen artículos tradicionales, concretamente, bordados y artesanía de mimbre famosos en la isla. Funchal es excelente por sus compras, ya que hay algunos centros comerciales que abren los siete días de la semana. Vale la pena realizar una visita a la Catedral (Sé) , el Museo Cidade do Açúcar, centrado en el comercio del azúcar, principal fuente de ingresos en la isla hasta principios de 1700, además de los edificios de siglo XVII y XVIII situados alrededor de la Praça do Município (plaza principal): el Museo de Arte Sacra, el ayuntamiento (Câmara Municipal), y la Igreja do Colégio.
Comida y bebida
Cualquier visitante de la isla debe probar el vino de Madeira. El vino seco, elaborado con diferentes uvas por granjeros locales, es un refresco excelente. Los entrantes no destacan mucho en el menú de Madeira, pero vale la pena probar el “bolo do caco“, un pan de harina de trigo con ajo, mantequilla y perejil, o un plato de sopa de tomate y cebolla coronado con un huevo escalfado. El pescado tiene un papel importante en la dieta local y muchos de los platos principales se basan en atún, espada, bacalao, gaiado (un pescado regional tratado como el bacalao), potas (parecido a un calamar grande) y una variedad de platos con bacalao. La carne a la plancha también es muy popular: “espetada” (un trozo grande de ternera condimentado con ajo y sal, atravesado con un palo de hoja de laurel y asado a fuego lento sobre brasas de madera), “carne vinho e alhos” (trozos pequeños de carne de cerdo marinados durante, al menos, un día en una mezcla de ajo, vinagre de vino y hojas de laurel, cocinados en esa misma salsa) y “picado” (trozos de ternera fritos con ajo y pimientos rojos, servidos en un plato grande rodeado de patatas finas. Todo el mundo pica del mismo plato con un tenedor o un palillo.