Dé una vuelta por el paseo marítimo hasta llegar al puerto, visite la plaza Vittorio Emanuele y disfrute de los pintorescos jardines.
¿Y por qué no visitar uno de los castillos más famosos de Brindisi durante su estancia? El castillo suabo fue construido usando viejos monumentos y muros de la ciudad y fue una de las bases navales durante la 1ª y 2ª Guerra Mundial.
La comida en Brindisi se centra alrededor de la pasta y el marisco. Gracias a su amplia línea costera, la selección de pescado es enorme. Para acompañar su comida, pruebe el Pettole, una de las especialidades locales: bolas amasadas fritas hechas a base de tomates secados al sol o alcaparras, cebollas y aceitunas.
Brindisi disfruta de un clima plácido la mayor parte del año, con veranos muy calurosos y un tiempo suave en primavera y otoño. En la zona montañosa del norte, las temperaturas frías y las fuertes nevadas son habituales durante los meses de invierno, mientras que el sur tiene unas condiciones climatológicas más secas y calurosas.